Para la actividad de mañana, han propuesto hablar sobre la Felicidad.
Felicidad, término tremendamente etéreo y subjetivo.
Para mí es una palabra que me gusta poco usar. Los momentos de felicidad son breves, y entran tantas variantes en juego que son prácticamente irrepetibles. Para conseguirlos yo recomiendo no esperar, no desear, vivir lo que toca cada momento, lo que aporta la “vida” con atención, sosiego, valorándolo. Si no nos gusta, hacer consciente que podría ser peor. Callar el pensamiento y no esperar que llegue de fuera; es más, cuando se tiene una actitud de dar, de compartir, de respeto, es más fácil que la persona sienta alegría, paz… ingredientes de la felicidad.